Me rio de los que no creen en casualidades. Si no, de qué otra forma explico lo que me pasó esta tarde. Si lo pienso fueron un montón de cositas las que se fueron alineando: el regresar temprano de ir a verificar el auto, no haber ido al cine, quedarme dormido 20 minutos, detenerme a comer unos tacos y llevar a componer la grabadora de mi mamá. Fue ahí, cuando cruzaba una calle rumbo al servicio eléctrico cuando el grito de ¡Revelo! me sacó de mi universo de pensamientos ñoños en el que siempre ando divagando.
Entonces se acercó a mi. Desde el principio supe de quien se trataba pero preferí que fuera él quién se presentara:
– Soy Alvi…
No sé si decir que hoy lo conocí, pues desde meses atrás leo su blog con la mayor regularidad que me es posible. Además de ser un gran bloguero, Alvi es doctor y vive a unas cuadras de mi casa. Resulta curioso que nos enteráramos de nuestra existencia al leer nuestros respectivos blogs y no por ser vecinos. Hablamos muy poco tiempo, aunque suficiente para darme cuenta que frente a mi se encontraba una persona de buen corazón. Simpático y dicharachero como sus letras, aprovechó para tomarme una foto con su cámara (que por cierto, está increíble), intercambiar unas frases más y se despidió.
Después de otros intentos fallidos, el de esta tarde fue mi primer encuentro con algún bloguero fuera de la atmosfera que brinda internet. No negaré que es un poco raro, pero la satisfacción que da el conocer a una persona a la que has leído sin un monitor de por medio es alucinante. Finalmente esto de la tecnología, a pesar de todo también sirve para acercar a las personas y conocerlas aun antes de toparse cara a cara con ellas. Por eso decía que no sé si sea correcto si decir que hoy conocí a Alvi, pues llevó meses leyendo de su vida y adentrándome de una u otra forma a su pensamiento.
Cae la noche y podría creer aquel encuentro casual nunca pasó. Afortunadamente su blog ya da testimonio de nuestro encuentro con esa foto en la que, ahora me doy cuenta, salí pésimo. A Alvi seguramente veré más seguido y en ocasiones futuras podremos hablar más tranquilamente o con unas cervezas de por medio, en el bullicio de una fiesta de esas a las que me ha invitado. Quizá nos vayamos de mujeriegos o un montón de cosas que uno hace cuando tiene un amigo.
Hasta entonces, y como le dije, nos estamos leyendo.
Entonces se acercó a mi. Desde el principio supe de quien se trataba pero preferí que fuera él quién se presentara:
– Soy Alvi…
No sé si decir que hoy lo conocí, pues desde meses atrás leo su blog con la mayor regularidad que me es posible. Además de ser un gran bloguero, Alvi es doctor y vive a unas cuadras de mi casa. Resulta curioso que nos enteráramos de nuestra existencia al leer nuestros respectivos blogs y no por ser vecinos. Hablamos muy poco tiempo, aunque suficiente para darme cuenta que frente a mi se encontraba una persona de buen corazón. Simpático y dicharachero como sus letras, aprovechó para tomarme una foto con su cámara (que por cierto, está increíble), intercambiar unas frases más y se despidió.
Después de otros intentos fallidos, el de esta tarde fue mi primer encuentro con algún bloguero fuera de la atmosfera que brinda internet. No negaré que es un poco raro, pero la satisfacción que da el conocer a una persona a la que has leído sin un monitor de por medio es alucinante. Finalmente esto de la tecnología, a pesar de todo también sirve para acercar a las personas y conocerlas aun antes de toparse cara a cara con ellas. Por eso decía que no sé si sea correcto si decir que hoy conocí a Alvi, pues llevó meses leyendo de su vida y adentrándome de una u otra forma a su pensamiento.
Cae la noche y podría creer aquel encuentro casual nunca pasó. Afortunadamente su blog ya da testimonio de nuestro encuentro con esa foto en la que, ahora me doy cuenta, salí pésimo. A Alvi seguramente veré más seguido y en ocasiones futuras podremos hablar más tranquilamente o con unas cervezas de por medio, en el bullicio de una fiesta de esas a las que me ha invitado. Quizá nos vayamos de mujeriegos o un montón de cosas que uno hace cuando tiene un amigo.
Hasta entonces, y como le dije, nos estamos leyendo.
9 comentarios:
jaja fue genial. me agradó esa onda de haberte topado. o sea que sí me reconociste, eh?
la foto original es mala, te la tomé con la opción "manual" de mi recién adquirida cámara con la que no tengo ni una semana. la foto original, lo repito,sale demasiado sobrexpuesta (mucha luz) la arreglé con photomatix hasta que me agradaron los colores.
la verdad es que me hubiera gustado gastar unos segundos más ajustando los valores correctos de la cámara en cuanto a abertura del diafragma, tiempo de obturación e ISO para que saliera mejor la foto, pero me puse algo nerviosón...siempre me pasa cuando me emociono por algo...en este caso: haberte visto.
me latió un buen tu camiseta.
un encuentro de esos muchas veces no da para más: de verdad me gustaría pasar más tiempo charlando contigo...imagínate...y con otros bloggers.
te mando muchos saludotes y el abrazo que se me pasó darte en ese momento
; )
Pues qué cagado.
Esa onda de las coincidencias está pocamadre
Aunque, como dice Freud, la mayoría son "actos fallidos".
'abrá Dio'!
Enhorabuena que ya se conocieron ambos, y que además son vecinos, sí que es casualidad.
Acá mis amigas y yo, también nos reunimos algunas veces al año, pero porque como buenas princesas que somos, cada una tiene su reino alejado de los reinos de las demás.
Bueno, ojalá y yo pudiera ir a verte algún día Gabrielito.
Te saludo y me despido
Atentamente:
Jessie
Que bueno
Sueño con encontrame alguna vez con mis amigos bloggers
Que bueno que uds puedan
me hiciste reìr con el tema " pensamientos ñoños"
te abrazo y me voy a visitar a tu amigo
A veces nos damos a conocer más por lo que leen de nosotros (así no escribamos de nosotros) que por lo que decimos.
José Roberto Coppola
Yo quiero encuentro causal no planeado totalmente sorpresivo y a parte que me tomen foto!
Que lindo encuentro! me encanto el relato y me dejo pensando, sera que alguna vez me encontrare con alguna de mis amistades blogeras?? who knows!
un saludo!
alvi: sí te reconocí. y por supuesto, habrá muchos momentos más en los que tendrémos la oportunidad de platicar de un montón de cosas. correspondo tu abrazo y te mando mis respetos.
eneas: pues no sé se si sea coincidencia, pero esos detallitos del mundo son extraordinarios.
jessie: imaginate, y eso que vivimos en la ciudad más grande del mundo. ojalá y algún dìa puedas venir.
mariel: pues es que es la verdad... me la vivo en pensamientos ñoños, y alguno que otro importante.
terapia: no había escuchado la frase, pero es tremendamente cierta.
k: falta de confianza, ¡llamanos!
patricia: quién sabe... ojalá y te pase. ¡gracias por tu visita!
Ah, hasta el momento no me he topado con ningún bloguero desconocido, pero qué bien que tu sí!
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