miércoles, 29 de abril de 2009

El amor en los tiempos de la influenza



Llegó la dichosa fase 5 y estamos a un paso de la pandemia. Los restaurantes han cerrado, la OMS ha declarado que a la ‘influenza porcina’ se le llame ‘influenza humana’, el virus se expande por la república mexicana y varios países del mundo. Todo eso pasa sin que uno pueda hacer nada que no sea el seguir las instrucciones para evitar cualquier contagio. Sin embargo hay algo inmune a todo esto. En medio de este encierro de nuestros ánimos y esperanzas sigo pensando en ti.

Aunque el mundo se haya vuelto otro hay cosas que no cambian. ¿Te has fijado que nuestra relación es cíclica? Has el recuento y verás que no miento. Siempre pasa algo en primavera, llega a la intensidad en verano, se enfría en otoño e inverna en diciembre. La gripe porcina o humana o porcina humana no impide que mis atardeceres encadenen tu recuerdo a mi mente, ni ha sido capaz de hacer que mis preocupaciones tengan como primer invitado la divinidad de tu nombre.

Amar en tiempos en los que una epidemia nos amenaza no varía el sentimiento, pero hace que las circunstancias sean diferentes. Hace que no verte ni poderte saludar sea el verdadero castigo de esta contingencia y que hasta en las horas de auto explorar mi conciencia sigas en cada una de las cosas que valen la pena. Va a sonar anti romántico pero es la pura verdad: eres un virus aun más mortal que cualquier influenza. Te cuelas por los ojos, por la boca o por la piel de uno, te apoderas de mi sangre y llegas al corazón para colonizarlo, amoldarlo a ti y después abandonarlo para volver sólo de vez en cuando.

La epidemia saca la psicosis y angustia de todos, eleva a la decima potencia nuestros miedos e inseguridades. A ti, en cambio, te dota de un brillo especial. Hablas de la situación y eres capaz de reír. Te pones sería y tu rostro adquiere un rostro de valentía que dan ganas de seguir. Estas consciente de la gravedad de las cosas pero no dejas doblegar tu alma. Si quisiera estar acompañado por alguien en el fin de los tiempos, te elegiría a ti. De seguro me harías ser valiente. De seguro saldríamos delante de cualquier imposible. De seguro, estaría seguro.

Por ti me estoy pensando muy seriamente el dejar de lado las recomendaciones y jugármela por estar a tu lado aunque sea un ratito. El contagio virulento me da miedo, el que te ausentes de mi mirada, me da temor. La gripe porcina me da miedo, pero… ¿y los celos?

El amor en los tiempos de la influenza no es tan diferente al amor en los tiempos de mundial, de vacaciones, de navidad o de pascua. Te tienen a ti como común denominador.

4 comentarios:

Karla dijo...

Es verdad!
Hay amores asi, cíclicos...
que nos matan con el paso del tiempo...y no en un solo brote...no se que es mejor

Anónimo dijo...

Definitivamente este virus y cualquier temblor no doblega al amor... pero es bueno estar enamorado en estos momentos dificiles¡¡¡¡¡¡
Un abrazo Angeluz

Mariel Ramírez Barrios dijo...

Hoy he venido para decirte que tengo miedo por ustedes,( y por nosotros)
que te cuides mucho
Y te leo
y me maravillos de nuevo
Que genial sos,amigo
Y me voy dicièndote
tengo miedo por ustedes
y por nosotros.
Cuidate muchìsimo.
Un beso sin barbijo.

gabriel revelo dijo...

karla: es mejor morír en la dulce agonía y con la esperanza de que el día menos pensado lo imposible se nos vuelva realidad. al menos yo prefiero esa anestecia.

angeluz: no sólo ahora, siempre es bueno estar enamorado de algo. de la vida, de una mujer, del futbol, de escribir. el chiste es querer querer.

mariel: no te preocupes... ahi vamos paso a pasito. el miedo no tiene cabida cuando cada uno de nosotros puede poner su granito de arena para que esta situación dificil muy pronto sea un enemigo derrotado más. gracias.