miércoles, 6 de junio de 2012

Lo que las letras dicen de mi (una noche en el Grafocafé)



Grafología: Ciencia que describe la personalidad de un individuo y determina características generales del carácter, acerca de su equilibrio mental (e incluso fisiológico), la naturaleza de sus emociones, su tipo de inteligencia y aptitudes profesionales mediante el examen de la escritura manuscrita.

La dinámica es simple. Escribes un par de líneas en una hoja y te cuentan lo que tu firma y forma de escribir dicen sobre ti. Todo esto mientras disfrutas de un cafecito y una rica crepa. Tal es el concepto de Grafocafé, un agradable sitio que conocí el pasado sábado.

Ubicado en el número 323 de la calle Galicia, en la colonia Portales de la Ciudad de México, este acogedor café fue un agradable descubrimiento. Nuestra amiga Brenda nos contó del lugar y decidimos ir en un grupito de amigos el sábado por la tarde. Una vez que llegas eres amablemente recibido por el personal del negocio. Desde ese momento te sientes como en casa.

Los precios son accesibles. Por 150 pesos tienes derecho al análisis de tus letras, a tomar un rico café (yo pedí el mío de chocolate blanco) y a un pastel. En caso de que en lugar de pastel pidas una crepa salada, el precio asciende a 180.

Después de acomodarnos en nuestros lugares, recibimos unas hojas blancas y las instrucciones de escribir por lo menos cuatro renglones de lo que quisiéramos. Unos minutos después, María Fernanda Centeno, nuestra grafóloga, recogió las hojas y comenzó su análisis de cada una de ellas. Ésta era la mía:



Sobra decir que ir a este sitio con personas a los que conoces es toda una experiencia, pues puedes comprobar si lo que dice la escritura de cada quien es o no real. Y saben, para mi sorpresa esta agradable grafóloga le dio en el clavo a la descripción de cada uno.

En mi caso, esto fue más o menos lo que me dijo:

Para empezar la grafóloga me comentó que rara vez había visto una hoja tan compleja como la que entregué (es que escribí en toda la hoja y hasta un dibujo hice). Me dijo que soy sumamente creativo, que todo el tiempo tengo cosas dándome vueltas en la cabeza y que esto bien encausado puede serme muy útil, pero también puede hundirme y no permitirme salir adelante. Me comentó que soy mejor jefe que subordinado, que tengo un carácter fuerte y que soy agradecido y romántico.

También soy independiente, propositivo, inquieto, auténtico e idealista. Soy optimista, por un lado me estreso y me preocupo, pero por el otro tengo la capacidad de levantarme de mis problemas sacando fuerzas de quién sabe dónde. Trabajo mejor solo que en equipo y tiendo a ser perfeccionista y autocrítico. Incluso me enojo conmigo mismo. Si algo se me mete en la cabeza soy necio y obstinado para conseguirlo. En una relación soy controlador y a veces celoso. Es difícil que me entregue y comprometa pues valoro mucho mi libertad.

Soy desconfiado, un tanto hipocondríaco y tiendo a exagerar las cosas. Soy sarcástico e irónico, tiendo mucho a la nostalgia y suelo regresarme al pasado, de hecho, cargo algo que no he podido dejar ni cerrar ese círculo. Soy bien administrado en todos los sentidos, siempre termino lo que inicio y soy inteligente. Soy introspectivo y tengo un mundo interior muy grande. Soy sonriente y amable, pero si me hacen enojar y lo deseo, sé qué decir para causarle daño a los que me rodean.

Podría dedicarme al diseño o a la mercadotecnia. A cualquier cosa que tenga que ver con crear o dibujar.

Y la verdad, sí... De hecho me gustó mucho todo lo que se dijo de mi. Después, a quienes íbamos en pareja nos hizo un análisis de cómo es nuestra relación, y esto fue lo que nos dijo a Tania y a mi:

Ambos somos exigentes y siempre queremos tener la razón. Nuestra relación es apasionante, aunque cuando nos enojamos tenemos peleas épicas pero también sabemos comprometernos. Somos dominantes pero también nos impulsamos mutuamente para seguir adelante. Aunque eso sí, ella manda en la relación.

Después de nuestras respectivas lecturas, aun estuvimos un rato platicando con la grafóloga, quien por cierto, a todos nos cayó muy bien. Es una chava amigable y extrovertida que incluso es columnista de una revista y colabora con varios medios.

Antes de despedirnos hablamos de política. De acuerdo a las firmas de los presidenciables, ella nos comentó que Peña Nieto se tiene muy poca confianza a sí mismo, López Obrador es necio y a como de lugar quiere tener la razón, y Gabriel Quadri es el más inteligente.

Así concluyó está velada. De verdad no pueden dejar de ir al Grafocafé. Yo pienso volver muy pronto. Da clic aquí para ir al sitio web del Grafocafé.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Chida la entrada, me gustaria que me analizaran mi escritura!

Ale C. dijo...

Bastante interesante, cada ves te conocemos un poquito más ;) Lastima que es hasta el DF

Te mando muchos saludos y un abrazote :D

gabriel revelo dijo...

Gracias anónimo. En realidad, si vives en la Ciudad de México basta con ir a este café para pasar un buen rato y que lean tu escritura. Saludos!!!

Ale: Gracias por leerlo. Si alguna vez vienes al DF no dejes de ir. Abrazos :)

XND dijo...

Pues sí, le dió a mcuhas cosas en el clavo. Aunque no se me hubiera ocurrido que eres celoso y controlador. lo de trabajar sólo, se nota a leguas: el sólo hecho de tener –y mantener– un blog, habla de trabajo, dedicación, enfoque en la perfección, y sobre todo, de trabajo independiente.

Suena súper interesante, y a un lugar agradable para convivir.

Te mado un fuerte abrazo, y un cálido saludo, mi Gavilán. =)

gabriel revelo dijo...

jonás: A mi tampoco se me hubiera ocurrido ser celoso ni controlador jajaja. Te recomiendo que vayas, es un buen lugar. Gracias por estar al pendiente de este blog y de su humilde autor.

Hartos saludos!!!